Angelina Mendez seleccionada vía admisión directa cupo Explora-Unesco

“Estudiar Medicina en la USACH me provoca felicidad y orgullo. Se me dio la oportunidad y estoy agradecida de estar en la carrera que siempre soñé”

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“Desde pequeña siempre quise ser médica. Era lo que más pasión me generaba”, cuenta Angelina Mendez, estudiante de primer año de Medicina en nuestra Universidad. “Tenía una tía que pasaba siempre hospitalizada. Yo iba a los hospitales, veía ese ambiente y sentía que era lo mío. Que a esto quería dedicarme”, agrega la joven que llegó desde Quellón, en la isla grande de Chiloé, decidida a cumplir su sueño en la capital.

Hija de padres que trabajan en el rubro de las salmoneras, la joven egresó de cuarto medio del Liceo Bicentenario Pueblo Feire. Acá nos deja su historia, sus sueños y sus esperanzas para el futuro.

 ¿Me puede contar cómo se gestó su postulación a la carrera de Medicina?

-Postulé a través del cupo por Admisión Directa de Explora-UNESCO. Básicamente, se trata de que en mi enseñanza media participé en un taller de ciencias, el cual dirigía el profesor Eduardo Olivares. En el taller hacíamos proyectos, postulábamos a ferias científicas, a congresos, viajábamos a diversos lugares de Chile a presentar nuestras ideas y competir, para después poder recibir subvención o poder ir a presentarlo a otras ferias, incluso a nivel internacional.

Yo postulé y participé en lo que se llama Par Explora Los Lagos y, por haber quedado con un proyecto, tenía el derecho a postular a un cupo Explora. Tenía que enviar una carta de motivaciones, hablar de mi trayectoria también como estudiante y presentar esta carta. Después de eso había un comité de evaluadores que se encargaba de decir si es que yo podía acceder al cupo o no.

Accedí al cupo Explora y dentro de eso podía postular a muchas carreras, dentro de muchas universidades a lo largo de Chile. Y dentro de esas, estaba la Universidad de Santiago de Chile para el cupo de Medicina, que solo era uno.

 ¿Cómo ha cambiado su vida en este primer año de carrera en Santiago?

-El cambio fue bastante grande, sobre todo por el tema de la locación. La ciudad en la que vivía era muy pequeña; había un máximo de 33.000 personas y muchos de ellos estaban ubicados en el radio urbano. Había mucha desconexión respecto al continente y la disponibilidad de algunas cosas no era la mejor. Los recursos que se invertían tampoco eran los mejores y el transporte público tampoco. Haber cambiado a una ciudad tan grande como Santiago, que es la capital de nuestro país, fue bastante radical. Lo llevé y lo estoy tratando de llevar de la mejor manera y creo que me adapté bastante rápido.

Y respecto a la carrera, cambiar de liceo a universidad, yo creo que es algo que le cuesta a cualquier persona, no solamente a mí. Fue un cambio bastante complicado porque, además de tener que adaptarme a la Universidad, tuve que adaptarme a la ciudad. Entonces fue un poco pesado, sobre todo los primeros meses. He estado tratando de sobrellevarlo, de amoldarme y de organizarme. Trato de ordenar todo de nuevo en mi vida; de reestructurarme.

 ¿Qué sensación le produce estudiar Medicina en la USACH?

-La sensación es de plenitud. Desde niña pensaba y tenía de meta estudiar la carrera de Medicina. No me fue muy bien en el tema de los puntajes de la PAES, pero haber podido acceder mediante este cupo directo  me dio una nueva esperanza porque yo pensé que no la iba a poder estudiar. Me siento muy satisfecha y completamente plena por estudiar la carrera de Medicina.

Además, estudiar en una escuela como la USACH es algo que me llena de satisfacción también. Yo no tenía mucho conocimiento respecto a la Universidad, fue una sorpresa total. Pero siento que la Universidad está hecha para hacer al médico más humano, enfocado en el respeto, en la atención respetuosa, en la empatía del médico al paciente y de médico a médico.

Estudiar Medicina en la USACH es algo que me provoca felicidad y me provoca orgullo porque yo pensaba que no iba a poder hacerlo y que iba a tener que renunciar a ese sueño, pero se me dio la oportunidad y estoy completamente agradecida de poder haberla recibido. De poder estar aquí en la carrera que siempre soñé.

 ¿Cómo ha sido su experiencia con los profesores y alumnos?

-Mi experiencia respecto a profesores y estudiantes ha sido muy buena y mejor de lo que esperaba. Yo considero que la generación con la que estoy, mis compañeras y compañeros, es la mejor generación en la que podría haber estado jamás. Tengo la perspectiva de que todos somos muy unidos, y si bien no todos somos amigos o no todos compartimos gustos en común, siempre se prioriza el respeto. Si alguien necesita ayuda, estoy segura de que siempre va a haber alguien que esté dispuesto a colaborar. Esas son cosas que uno aprecia, considerando que igual la carrera es algo pesada y que muchas veces hay gente que no tiene un apoyo.

Sé que no soy la única persona de regiones. Tengo más compañeros y sé que muchos están solos, al igual que yo, viviendo acá en Santiago. El hecho de que haya un ambiente tan lindo entre nosotros es algo que realmente se agradece porque da gusto ir a la Universidad, que haya gente que se preocupe por ti, que haya personas que estén dispuestas a ayudarte. Esas son cosas que uno no espera, pero que se agradecen con todo el corazón.

Respecto a los profesores, considero que, si bien hay algunos que son más llevados a sus ideas, otros de verdad se preocupan del bienestar de uno. Que están dispuestos a cambiar las fechas de las pruebas; cambiar los contenidos o adaptarlos más. Si uno necesita hablar algo con ellos o plantearles alguna situación, problema o preocupación, estoy segura de que siempre habrá la disposición de ellos de buscar una solución. Entonces son cosas que se aprecian y que tal vez no se ven en todas las universidades.

 ¿Cómo se proyecta en el ámbito profesional en el futuro?

-En los siguientes años de estudio me proyecto como una persona más madura y con mayor aprendizaje. Una persona que se siente satisfecha del recorrido realizado y con ganas de enfrentar lo que le pueda venir en el futuro. Me imagino y me proyecto cumpliendo con lo que tengo que hacer. Cumpliendo con mis pruebas, atendiendo a los pacientes, conociendo los casos clínicos y profundizando cada vez en la medicina. Esto conlleva empatía, respeto y comprensión al escuchar. Me proyecto siendo una buena profesional, cumpliendo con mi rol para ayudar en la sociedad.